¿Cómo se han preparado las academias de idiomas de cara al COVID?

• infoidiomas
• 05 Oct 2020 - 10:30
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Es una duda que muchos nos habéis preguntado en este inicio de curso; y es algo totalmente lógico. Sí, este año te has propuesto mejorar tu nivel de inglés, francés, alemán o “vetetúasaber”; pero quieres hacerlo en un entorno seguro dadas las actuales circunstancias. Seguro tanto para ti como para los tuyos.

Como decíamos: es lo más lógico del mundo.

Pues bien, vamos a tirar de datos para ver cómo está el panorama en el mundo de las academias de idiomas:

¿Qué fuentes se han tenido en cuenta de cara a este artículo?

Dos de las más prestigiosas a nivel nacional en relación al aprendizaje de idiomas: la Federación Española de Centros de Enseñanza de Idiomas (FECEI) y la Asociación de Centros de Enseñanza de Idiomas de Andalucía (ACEIA).
Si bien dicha asociación opera tan sólo a nivel de Andalucía (con 170 escuelas integradas dentro de la misma, eso sí), el FECEI engloba a más de 500 centros de idiomas a nivel nacional.

Estamos por lo tanto ante un volumen de academias lo suficientemente amplio para saber si éstas están pudiendo adoptar las medidas higiénico-sanitarias necesarias. También pasa saber cómo se están desarrollando las clases y el día a día en estos centros.

¿Quieres saberlo? Pues vamos allá.

¿Cumplen las academias de idiomas con las medidas higiénico-sanitarias exigidas?

¿Respuesta rápida y contundente? Sí. Por supuesto que sí.

Las escuelas de idiomas privadas de España han reportado todas aquellas medidas de seguridad requeridas por las instituciones estatales. Es decir, estamos hablando del uso obligatorio de mascarillas, de un aforo máximo del 75% por aula y zonas comunes, de la presencia de geles hidroalcóholicos, de la limpieza de todas y cada una de las aulas tras cada clase, de distanciamiento de 1 metro y medio entre cada uno de los alumnos, etc.

Por no hablar de que cada escuela cuenta con una empresa de Prevención de Riesgos Laborales, un Plan de Contingencia y un Protocolo de Actuación.

Pero es que, además, muchas academias han ido más allá de esos puntos: bastantes de ellas han realizado una gran inversión económica para, por ejemplo, instalar mamparas de separación. Incluso del uso de luz ultravioleta C para higienizar las aulas.

¿Pero entonces cómo se están desarrollado las cosas en las academias de idiomas de cara al COVID?

Desde el propio FECEI nos informa que hasta la fecha no se ha producido ningún caso de SARS-CoV-2 en ninguna de las escuelas de idiomas que tienen monitorizadas (puedes tomar nota de ellas si quieres en nuestro listado de academias de idiomas).

Por lo que sí, parece que las medidas de seguridad que se han adoptado están dando resultado.

Aunque, sin duda, hay otros factores que explican este nulo número de casos de COVID en las academias de idiomas:

• Primero de todo; ha sido de gran ayuda que en los últimos años la gran mayoría de centros se hayan puesto las pilas con el tema de los grupos reducidos. Si en este último lustro (año arriba, año abajo) has pasado por alguna academia seguro sabes de qué te estamos hablando: clases de no más de 10 alumnos, aulas suficientemente grandes para disponer a todos ellos en círculo y así favorecer la participación y el diálogo (pero siempre con separación de por medio), etc. Sí, estos grupos reducidos no se implementaron de cara a una situación de pandemia (sino para lograr así un aprendizaje más individualizado en el cual el profesor pueda resolver las dudas de cada uno de los alumnos); pero oye, si ha sido de ayuda en cuanto a las actuales circunstancias, pues bienvenido sea.
• Los alumnos suelen ocupar las instalaciones unas 2-3 horas de media a la semana. De nuevo, si en algún momento te has apuntado a una academia de idiomas seguro ya sabes de qué va esto: la gran mayoría de cursos de idiomas suelen constar de no más de 3 horas de estudio a la semana. Que si la tarde del lunes, que si la tarde del miércoles, que si la tarde del viernes y ya está. Estos horarios están pensados así para que el alumno pueda asimilar, sin saturarse (y no como ocurría con la sintaxis en Bachillerato…)), los distintos conceptos aprendidos en cada una de las clases. Un tipo de horarios que favorece, además, la correcta higienización de cada una de las aulas.
• Durante el presente curso académico, casi todos los centros están ofreciendo sus cursos en tres modalidades distintas: presencial, online o semipresencial. Y podemos asegurarte que están poniendo toda la carne en el asador (una de las ventajas que tenemos como buscador de cursos de idiomas es que estamos en contacto con muchas academias a nivel nacional). ¿Cómo? Pues de cara a las clases presenciales poco más que comentar, pero en el terreno online no se han limitado a subir los temarios por escrito a aulas virtuales y ya está. Estamos hablando de clases por videoconferencia para practicar ese tan necesario nivel conversacional; de tutorías individualizadas; de recursos audiovisuales a destajo… En fin, que se lo están tomando en serio.

Así que ya ves, la propia naturaleza de las academias resulta de gran ayuda para que en dichos centros no se haya producido todavía ningún caso: pocos alumnos en pocas franjas horarias muuuuy espaciadas en el tiempo unas de otra. El hecho de que hayan adoptado las medidas higiénico-sanitarias necesarias, y que estén ofreciendo sus cursos de idiomas en distintas modalidades, no hace sino aumentar la seguridad de este sector.

A pesar de todo ello queremos aprovechar este momento para lanzar un último mensaje: sí, son estos centros quienes han de adoptar estas medidas de seguridad. Y sí, es el Estado y las instituciones quien se han de encargar de la gestión legislativa y operativa del actual momento que vivimos. Pero eso no ha de servirnos para quitarnos de toda responsabilidad: cuando vayas a una academia de idiomas (o al metro, al súper o a casa de la vecina) toma todas las precauciones oportunas.

Haz uso de ese gel hidroalcóholico que te han puesto ahí al alcance de la mano; no te andes quitando la mascarilla cada dos por tres; respeta la distancia de seguridad… En fin, ya sabes a qué nos referimos.
A ver si entre todos acabamos con el maldito bicho. Y, desde luego, que éste no nos quite las ganas de seguir aprendiendo.